Cuidados y consejos para cada tipo de piel
25 de agosto, 2022
La piel es el órgano más extenso que tenemos y, por lo general, existen 4 tipos de piel. Cada una posee diferentes características; por ello, es importante que sepas cómo cuidarla, pues lo que funciona para una, no necesariamente lo hará para otra. En esta nota te enseñaremos algunos tips que te serán de mucha ayuda.
Para pieles mixtas
Recuerda que tienes dos tipos de piel. Trátalas diferentes.
Por lo general, las pieles mixtas acumulan grasa en la zona T (frente, nariz y barbilla), pero son secas en las mejillas. Por ello, es recomendable tratar estas dos áreas de manera individual. Por un lado, se debe aplicar una crema reguladora de grasa en la zona T para controlar el brillo facial. Mientras que, en las mejillas se debe emplear una crema de gran hidratación.
Limpia tu piel dos veces al día.
En las mañanas, utiliza un jabón especial para retirar toda la grasa y por las noches, emplea un limpiador con base de crema para reponerse de la humedad. No es aconsejable usar jabones comunes, ya que pueden causar sequedad en la zona de las mejillas.
Para pieles sensibles
Limpia el rostro con cuidado.
Realiza una limpieza diaria, pero hay que tener sumo cuidado de no maltratar la piel. Evita frotar, pues los movimientos agresivos irritan la piel. Además, procura aplicar agua tibia. Por último, pero más importante, usa productos que no contengan fragancias, colorantes y alcohol.
Exfóliate solo una vez por semana.
Si bien es cierto que la exfoliación ayuda a eliminar las células muertas de la piel y promover su renovación, hacerlo más de una vez por semana en una piel sensible puede ser perjudicial. Evita los exfoliantes químicos, que contengan hidroxiácidos, y aquellos que tengan gránulos. En su lugar, elija un exfoliante enzimático, que está hecho a base de ingredientes naturales cuyas enzimas son capaces de renovar la piel de forma natural.
Para pieles grasas
El rostro necesita varias exfoliaciones por semana.
Las exfoliaciones son más frecuentes en las pieles grasas, sobre todo, si carecen de acné. Es mejor realizarlas en las noches, entre 3 a 4 veces por semana. Esto ayudará a reducir el brillo facial.
Hidrata bien tu piel.
Recuerda que una piel hidratada no es sinónimo de piel grasa. Una piel hidratada contiene un alto nivel de agua, en cambio, la piel grasa está llena de aceites y lípidos. Procura utilizar productos libres de aceites. De lo contrario, podrían obstruir tus poros. Son preferibles las lociones en gel, pues absorben mejor que las cremas hidratantes.
Para pieles acneicas
El desmaquillado es crucial.
Una piel maquillada apenas podrá respirar. La higiene es fundamental para evitar que las bacterias proliferen. Desmaquilla y limpia la piel con productos suaves, que no estén formulados con alcohol. Se sugiere aplicar espuma facial limpiadora.
Manos fuera. Impide tocas las granitos.
Sé cuidadoso. Evita tocar, frotar, de forma agresiva, los granos. Eso solo hará que se inflame e irriten los poros. Además de que, puede llevar a desarrollar cicatrices.
Para concluir, sin importar el tipo de piel, la protección solar es indispensable y de todos los días. Opta por una que se adapte a tu piel para estar protegida y conservarla. Encuentra todo lo que necesitas para tu piel en nuestra tienda virtual.
